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En esta sexta noche de celebración mesiánica, el propósito era declarar una palabra de dirección profética
para la familia.
En nuestros hogares y muchas veces nosotros mismos hemos dicho palabras negativas a quienes nos rodean pero
de nuestra boca no salen palabras de bendición, prosperidad y cariño. En éstas tres noches mesianicas soltamos palabras
proféticas para nuestra familia y cancelando toda palabra de maldicíón que hayamos soltado o que hayan soltado en nosotros.
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